Delia Enriquez recorre Durango con firmeza y esperanza: “El segundo piso de la transformación llegará con la fuerza del pueblo y de las mujeres”

Peñón Blanco, Dgo.— Con paso firme, convicción obradorista y el corazón puesto en las causas del pueblo, la diputada local Delia Enriquez ha acompañado los cierres de campaña de las y los candidatos de Morena en todo el estado, convencida de que el segundo piso de la Cuarta Transformación está cada vez más cerca de consolidarse en Durango.

Este fin de semana, la legisladora participó en el cierre de campaña de Elías Bustamante en Peñón Blanco, donde expresó su total respaldo al proyecto de Morena y a las nuevas generaciones de liderazgos comprometidos con la justicia social y la verdadera democracia.

“Estoy segura de que Elías será el próximo presidente municipal. Cuando el pueblo se organiza, nada lo detiene. Y cuando las mujeres y los hombres caminamos juntos con dignidad, la transformación se vuelve imparable”, expresó Delia Enriquez, quien ha sido una voz firme en el Congreso a favor de las mujeres, los derechos sociales y el legado del presidente Andrés Manuel López Obrador.

La diputada ha recorrido múltiples municipios en los últimos días, llevando un mensaje claro: la transformación no se detiene, y ahora va por todas las regiones, por todos los derechos y por todas las mujeres. Con un discurso cercano, humano y con profundo arraigo en los principios de la 4T, ha reafirmado que Durango está listo para construir un futuro donde la honestidad, el trabajo en comunidad y la justicia sean los pilares del gobierno.

“Somos mujeres de territorio, no de escritorio. Estamos aquí porque creemos en la política que sirve, no en la que se sirve. Y vamos a seguir caminando hasta que la transformación llegue a cada hogar duranguense”, sentenció Enriquez ante simpatizantes que la ovacionaron en Peñón Blanco.

A una semana de la jornada electoral, Delia Enriquez se consolida como una de las figuras más cercanas al pueblo dentro de Morena, una mujer que no ha dejado de caminar y que representa con fuerza el espíritu feminista y social del movimiento obradorista.